El 24 de febrero de 1838
se convocaron elecciones municipales en Villamayor. Según la legislación
vigente (Constitución de 1837 y Ley de ayuntamientos de 1823) era por sufragio
masculino “universal” indirecto en dos grados.
El ayuntamiento publicó
bando convocando a todos los vecinos el día 25, después de misa, en las Casas
del Lugar. Ese día tuvo lugar la primera vuelta de las elecciones y quedaron
elegidos como los nueve electores: Francisco Alcrudo, Lucas Mayoral, Ygnacio
Alabes, Andres Blanco, Mariano Valero, Pedro Jose Duarte, Gregorio Murillo,
Agustin Nicolas, y Frutuoso Mayoral.
El día 4 de marzo de
1838, mientras 2.700 soldados carlistas se aproximaban hacia Zaragoza, en Villamayor
se elegía alcalde, cargo que recayó en Aniceto Mayoral.
Aunque Villamayor contaba
con 200 milicianos nacionales en defensa del régimen constitucional, la reina
Isabel II y las libertades, reinaba el miedo. Más desde que se conoció el
intento de asalto carlista a la ciudad de Zaragoza en la madrugada del Cinco de
Marzo de 1838. En cualquier momento, los carlistas se podían presentar en
Villamayor.
Tanto era el miedo de las
autoridades y vecindario adscritos a la causa isabelina y liberal que el 4 de
abril de 1838 acordaron formar un doble ayuntamiento. Es decir, se formó un
ayuntamiento carlista, al margen del liberal. Así, en caso de que llegara una
partida armada de carlistas, no se ofrecería resistencia y se procuraría
salvaguardar la vida y bienes de todo el vecindario.
Este ayuntamiento
filocarlista estaría formado por: Antonio Fernando, Gregorio Lostao, Felipe
Bernardo, Macario Belenguer y Serapio García. Se acordó también con el cura
párroco Pedro Gaspar Loscos “el que se brindó a poner la paz y
tranquilidad por su parte en cuanto le fuera posible”.
Para alivio de todos en
Villamayor, no hizo falta recurrir a esta solución, ya que la localidad quedó toda
la Guerra carlista (1833-1840) en manos isabelinas. Sin embargo, eso no evitó
conflictos internos entre los vecinos liberales y los sospechosos de carlismos,
con asonadas y reyertas en esos años. Eso sucedió en numerosos pueblos
aragoneses y del resto de España. De ello hablo en mi libro “Armas y votos.
Politización y conflictividad política en España, 1833-1843” (Institución
Fernando el Católico, 2020).
Más información de Villamayor en el s. XIX, aquí: https://lamiradahistorica2.blogspot.com/2019/02/villamayor-en-la-primera-mitad-del.html
Fuente: Archivo Municipal
de Villamayor
Daniel
Aquillué
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